
Otro más.
Otro sueño extraño de nuevo.
Yo y otra persona...del sexo contrario, pero no se quién era.
No recuerdo su forma, ni su cara, solo sé q era ella.
Sinceramente no se q pintaba allí porq no hacía nada, no era más q una sombra borrosa, pero la sentia todo el rato....no sé.
Recuerdo la tierra, seca y arenosa, gris.
De esa q parece encostrada, y q se desmenuza cuando la pisas.
El cielo era blanco, y recuerdo q llevaba unos vaqueros negros y una camisa blanca.
Iba desclazo.
No se como iba ella...creo q desnuda..pero... no se...da lo mismo supongo.
Frente a nosotros un arbol negro, como un fresno, con esa madera tan oscura q parece quemada.
Sus ramas eran delgadas y nudosas, hasta el punto q en el sueño cojo una de ellas y descubro q cada final de rama es identica a un dedo humano, envejecido, pero con su uña incluida.
Veo un fruto en la rama, y por más q intento recordarlo, me divaga la mente entre un fruto redondo brillante y naranja, como un caqui, envuelto en tres ramitas negras en forma de dedito, o una fruta como una especie de madroño grande y negro con su forma de bolita co pinchos.
Pero al cojerlo era definitivamente la primera, porq recuerdo q al tener q romper los deditos estaba acojonado, por si sangraban en plan pelicula de terror japonesa...pero no, se rompieron como lo hace cualquier rama seca, astillada y con su crac de turno.
El "caqui" parecía duro y jugoso pero al cojerlo...se deshizo en mis manos, estaba blando , como podrido, lo abrí y se me untaron las manos del pringue aceitoso del fruto.
En su interior unos gusanillos blancos bailaban como al son de una balada.
Suelto el fruto de repugnancia y de repente el arbol empieza a gitarse y retorcerse violentamente mientras los deditos se mueven y se doblan tambien igual q los de una persona.
Lo siguiente q recuerdo despues de eso es un terror inimaginable y un deseo enorme de correr.
Y tras eso...desperté.
No es broma, es un sueño y no os imaginais lo q te ralla levantarte a las 5:30 de la mañana despues de un sueño así.